domingo, 18 de octubre de 2009

La gaviota y el ratón


La gaviota volaba sobre una playa del golfo cuando vio un ratón. Bajó del cielo y le pregunó al roedor:
-¿Dónde están tus alas?
Cada bicho habla un idioma, el ratón no entiendió lo que ella le decía; pero vio que al animal que tenía delante le salían dos cosas extrañas y grandes del cuerpo.
"Debe de tener alguna enfermedad" pensó el ratón.
La gaviota se dio cuenta que el ratón miraba fijamente sus alas: "Pobre. Lo atacaron los monstruos, lo dejaron sordo y le robaron las alas."
Compadecida, lo cogió en su pico y lo llevó a pasear por las alturas. "Al menos, mata la nostalgia", pensaba mientras volaba. Después, con todo el cuidado, lo dejó en el suelo.
El ratón, durante algunos meses, se conviertió en una criatura profundamente infeliz: había conocido las alturas, vio un mundo vasto y hermoso.
Pero con el paso del tiempo acabó acostumbrándose de nuevo a ser un ratón, y pensó que el milagro que le había ocurrido no era más que un sueño.