El día de hoy lo comencé muchísimo mejor que ayer, ya que ese día ni siquiera me digné a ir a clases de inglés porque la gripe me estaba asesinando las neuronas. Las clases tomaron su curso recurrente mientras yo llenaba mi cabeza de canciones de Hello Seahorse! como único recurso para no sentirme tan mal por el hecho de que no iba poder asistir al concierto que tendrían hoy en la FENAL. Y pues mientras leía tranquilamente sobre mi mesa-banco toda así despreocupada y feliz, al salón que se encuentra junto al mío comienzan a poner música de de los Soudtrack que el profesor de Creatividad nos había dejado a nosotros también, pero ya mi grupo está bien pendejo y sólo uno de los diez que habían quedado de traerlo por adelantado lo trajeron, pues nos fregamos todos los demás que estábamos bien emocionados diseñando toda la onda de las canciones que habían marcado mi vida (bueno, yo SÍ estaba entusiasta con mi trabajo).
Bueno, ya para no salirme del tema, que escucho las melodías y que me pongo bien aturdida y triste. No sé qué le pasó a mi conciencia o parte de mi cerebro que se puso todo melancólico por escuchar música que ni siquiera me gusta. La única conclusión a la que pude llegar es que me acordé de cierta persona y pues se me engarruñó el corazón. Sí, ya sé: “Pero qué idiota y sentimental me saliste, Maga” Afortunadamente me recuperé de ese “lápsus brutus” y me lancé a la FENAL para encontrarme con Werther.
Y curiosamente en la FENAL me sentí tan bien… y cómo no me voy a sentir así de bien si estaba en compañía de las dos cosas que más me hacen feliz: los libros y Werther. Extrañamente nuestra relación se distingue por una peculiar sucesión de facetas: 1.- La indiferencia inicial, 2.- Piquetes punzo-cortantes con extremidades y mordidas, 3.- Miradas incomodas, 4.- Lectura de mentes, 5.- Campos semánticos de pendejadas y finalmente 6.- Silencio mutuo y Cansancio pos-aventura.
O.o Nunca pensé enlistar estas facetas. El punto es que siempre estoy feliz con mi amigo y es el único que no le molesta mi personalidad y humor retorcido (y eso porque él está peor que yo jajaja)
Ñe! Te quiero muchísimo Mi Sandman jajajajaja ^^
Bueno, dejando mi lado cursi, les cuento que compré 6 libros: “Ultimo Round” tomo I y II, “La vuelta al día en ochenta mundos” tomo I y II; los dos de Julio Cortázar (y es aquí donde doy las gracias a mi estimadísimo profesor que llamaremos “El Gordo” por patrocinarme el dinero para estos 4 libros) “Sputnik, mi amor” de Haruki Murakami y “Amrita” de Banana Yoshimoto.
En conclusión, creo que ha sido la mejor FENAL de mi vida …
¿Y que por qué pongo la foto de Death y Sandman? Sencillamente porque Werther y yo nos parecemos mucho a esa pareja de hermanitos jajaja
La interpretación de cada fotografía puede ser un tanto subjetiva, ya que todos queremos ver lo que nuestras mentes quieren. La fotografía aquí presentada es el desastre común de un escritorio de una mujer de 21 años, estudiante, que posee una variedad de gustos como puede observarse el anime, música, libros, ajedrez, y coleccionista de alguno que otro fetiche.
Especular sobre la vida de esta joven es muy fácil por el desorden que tiene en su mesa: decir que es una desobligada, que nunca está en su casa o que no le interesa el orden entre su caos. También puede interpretarse con el hecho de que esta persona tiene una variedad de criterios por la cantidad de libros, experiencias y demás sucesos de su vida que la han llevado a tomar una transformación religiosa totalmente diferente a la que tenía cuando ésta era una adolescente. Viendo muy en el fondo de la imagen, en una repisa junto a una planta se encuentra una cruz. En sus mejores años, esa cruz representó para esa joven una fe ciega al catolicismo, donde entre más mal le iba en la vida más se aferraba a las faldas de las creencias de su religión. Aunque para la fortuna de ella, con forme iba madurando sus pensamientos y criterios, se alejó de forma afortunada de una religión que sólo atontaba su manera de vivir para tomar el camino que mejor le pudo convenir y es el existencialismo.
Su transformación no fue sólo una concepción temporal, fue un proceso que le causó varios conflictos, pero que la sacó de un hoyo que la estaba comiendo lentamente en las arenas movedizas de los débiles y sumisos. El tomar el existencialismo para ella es darse cuenta que es unirse a la experiencia de la angustia, que no debe ser tomada la palabra de forma literal, mas bien, como aquella experiencia en la que nosotros los seres humanos nos descubrimos como creadores de la vida libre y responsables de nuestro propio futuro. En pocas palabras uno se va liberando de la espera de que un "Dios" nos va a salvar de o nos va ayudar en nuestros problemas. Está en nosotros el no dejarnos caer en las falsas promesas y auxilios ilusorios para emerger de esas aguas de tonterías de fe en algo que no existe y entrar en un optimismo desengañado. Pues de ahora en adelante vivirá con la certeza de que sólo él dirige su propio destino.
Si bien, para muchos el pensamiento del existencialismo es totalmente pesimista, alegando que es una filosofía del absurdo y del derrotismo que hace concebir al ser humano como un proyecto inútil al creer en un Dios, creo que queda claramente expuesto en el párrafo anterior que la falta de información sobre un tema hace que las personas siempre se dejen llevar por la primera impresión de las cosas que les rodean.
De cualquier forma, la persona que describe subjetivamente la foto presentada es la misma dueña de todo el desorden anterior. Su vida pueden estar sobre esa sociedad líquida que en algún momento fue nombrada en la clase universitaria "El hombre un ser social". No estoy diciendo que la autora de este escrito carezca de los valores que fundamenten su existencia o sean guía para su actual vivir, sino que gracias a todo lo que ha conocido ha podido sacar de esas experiencias lo mejor y apropiarlo a su persona. Esto es, claro está, que es un pensamiento totalmente post modernista, pero es la época que nos tocó vivir a mi generación, una época de diversidades y pluralismos que no nos hacen quedarnos con una sola idea, teoría o forma de vida.
Comencé un día nuevo en el que dejaría atrás un montón de vicios personales que ya estaban poseyendo mi vida de manera muy brutal. Y bueno, tomé la primera decisión alejándome de un hombre que me estaba destrozando mi personalidad tan peculiar y chingona que tengo (¡huy que autoestima, hombre!), para moldearme a sus designios de querer de mi una mujer sumisa, empalagosa y llena de detalles de colegiala. La verdad no estoy para esas cosas y perdónenme si algún lector se ofende al tener el mismo pensamiento de mi antigua pareja sobre cómo tiene que ser la "novia perfecta", pero yo no lo comparto ni lo compartiré nunca.
Y pensando que al cortarlo me llevaría a sus séquito de amigas furiosas tras de mí, vaya la sorpresa que me llevé de que todo estaba tranquilo. A pesar de eso no me fié de la calma tan peligrosa y me mantuve a la distancia de todos; cosa que ya haré ahora en adelante, pues para el colmo de mis males, resultó que a todo el mundo le contaba sobre mi relación con el Fulano y que él era el malo y blah, blah, blah. Moraleja: ¡Ni piense cerca de la gente chismosa! De por sí que no me gusta contar mi vida privada y ahora salen con que yo parezco perico… Ay, como sea, no soy la "monedita de oro" de nadie.
En otros menesteres, hoy fue el día de campaña para elegir a la nueva planilla de estudiantes que se encargan de todos esos eventos sociales y disque para nuestro beneficio. Y yo esperando cosas acá bien profesionales de campaña, me salen con la jalada de sus globitos, papel maché en las cabezas, venta de aguas de colores, y porras culerísimas; que más que porras parecían estribillos de la canción "Aserejé"… Afortunadamente puede salir de ese alboroto de gente y me fugue a la plaza comercial cercana para arreglar unos trámites erróneos que había hecho la compañía telefónica que manejo. Luego me dirigí a ingerir una ensalada exageradamente cara pero que estaba muy buena y luego regresé a la universidad para ver a mi querido Werther. Hoy es su cumpleaños y le regalé un clon suyo jajaja. (Mejor ni pregunten qué fue) y creo que fue lo único que alegró mi día y fue motivo de festejo para mí, aunque para él no es razón para alardear sobre su natalicio.
Aun me sigue despertando un montón de suspiros su persona… pero nuestra amistad fenomenal no la cambiaría por una relación que sé que yo llevaría al fracaso.
