Hoy esperé y esperé ver, sobre el mostrador y las ventanas de mi local, el rostro de Werther... y nada. Recibí sus mensajes y satisfacieron un poco esas ansias después de no saber nada de su existencia. Ya hasta estaba pensado que me lo he estado inventado, pero no, si existe (fiuf que bueno...-_-)
Hoy también terminé el libro de Katayama. No me supo a nada. Es muy fácil su lectura y para mi tristeza resultó con un trama tan sencillo que no lleno esas amplias espectativas que tenía de dicho autor. Ya desde antes, por verle la portada tan comercial que tiene, me desilusionó un poco. A pesar de eso, no me dejé llevar por las apariencias y decidí animada a leerlo. Pero creo que mi intuición era acertada. Pero bueno. De las cosas que puedo decir de esta novelilla es que trata de una manera inocente, pura y sin morbo lo que es el amor. Hasta eso, no cae en lo meloso o romántico.
Comenzaré leer ahora a Mishima. De este autor espero todavia más por que me lo recomendó Oliveira. Y este hombre si es todo un conocedor (jojo me lo imaginé con un monoculo y riendo bien pomposamente xP)
¡Uy! Truenos y relampagos me estan cantando al oido en estos momentos. Me recordaron que hoy en la mañana el susurro de la ligera lluvia que caía cerca de mi ventana me despertó y logró que no anduviera de malas en la mañana (siempre me pongo gruñona cuando me despierto >_<)
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